top of page
Buscar

Los lamentos de la reina

  • Foto del escritor: José Luis García
    José Luis García
  • hace 12 horas
  • 2 Min. de lectura
ree

Érase una vez un reinado, donde vivía una pareja de jóvenes reyes llamados Arturo y Mercedes, con una vida muy tranquila y feliz.


Un día, al levantarse la reina, le comentó a su marido su gran preocupación por su estado de salud:


-Me duele todo el cuerpo, no sé qué me pasa.


-No te preocupes Mercedes, estarás muy cansada de estos días. – respondió el rey quitándole importancia.


Sin embargo, al día siguiente la reina se seguía encontrando mal y volvió a trasmitir su preocupación al rey Arturo. Esta vez, el joven se alarmó más y comenzó a buscar ayuda.

Había pasado ya un mes, y habían visitado a médicos, enfermeros, profetas y una gran multitud más de profesionales, sin resultado alguno.


El estado de salud de la reina empeoraba cada día que pasaba, ahora apenas podía comer por si misma o incluso levantarse de la cama o mantenerse en pie, y no encontraban a nadie que pudiera poner remedio a esa enfermedad.


Más tarde, llegó a los oídos de Mercedes, que una anciana del lugar se dedicaba a curar enfermedades complicadas, por lo que le propuso la idea a su marido. Este se negó rotundamente y le dijo:


-Mercedes, seamos realistas, ni los mejores médicos de la zona te han podido curar, ¿de verdad piensas que una anciana podrá hacerlo? ¡Estás loca!


Habían pasado un par de meses y el estado de salud de la reina no mejoraba absolutamente nada, por lo que Arturo decidió mandar a los mejores caballeros para buscar a la anciana, y una vez dada con ella la llevaron al castillo ante la presencia de la reina. Le realizó un exhaustivo reconocimiento y añadió:


-No se preocupe, cuento con todo lo necesario para su recuperación.


El rey, sin embargo, no podía aguantarse ni la risa ni su cara de incrédulo.

La anciana volvió un par de meses después con las hierbas y los medicamentos que necesitaba y dijo:


-Perdonad por la tardanza, pues me ha sido realmente difícil encontrar todo lo que necesitaba. Este es uno de los casos más complicados que he tenido.


-¡Debes curar a mi mujer! Si la situación no cambia tendrá sus consecuencias…- le advirtió el rey.


La anciana sabía que tenía que curar a la reina, ya que de no ser así el rey Arturo mandaría su ejecución.


Para sorpresa de todos, la reina al despertarse observó una gran mejoría. Sin embargo el rey pensaba que se trataba de la confianza hacia esa anciana, pero esto mejoró hasta su completa recuperación.


Arturo no salía de su asombro, aceptó su gran error y mandó nuevamente a sus caballeros a buscar a la anciana para pedirle sus más sinceras disculpas.


-No se preocupe Don Arturo, comprendo perfectamente que pienses que una simple anciana no puede ayudar si los mejores curanderos no pudieron hacerlo.


El rey le ofreció aposento en su enorme castillo y una gran cantidad de dinero.


-Me niego rotundamente, lo siento pero no puedo aceptar nada. Mi vida aquí no sería como a mí me gustaría. En el lugar donde vivo la gente me necesita. Muchas gracias.



REFLEXIÓN:

“A veces la solución está más cerca de lo que uno piensa, y es más sencilla de lo que parece”


FIN


 
 
 

Comentarios

Obtuvo 0 de 5 estrellas.
Aún no hay calificaciones

Agrega una calificación
FOTO+PORTADA.jpg

Sobre mí

La historia de José Luis García es un blog dedicado a compartir las experiencias y vivencias de una persona real, llenas de ejemplos de superación, contadas de forma amena y cercana. Acompáñanos en este viaje lleno de emociones y aprendizaje.

Leer más

Únete a mi lista de correo

¡Gracias por tu mensaje!

© 2035 Creado por Trotamundos con Wix.com

  • Facebook
  • Instagram
  • Pinterest
  • Twitter
bottom of page